Cuando realizas una inversión no debes fijarte únicamente en cuánto vas a ganar, sino también en cómo tributan fiscalmente los beneficios obtenidos para que puedas conocer tus rendimientos netos.
Si tu residencia fiscal está fuera de España, puedes reducir la retención en origen del 19% sobre tus rendimientos, enviando tu Certificado de Residencia Fiscal.