Los ETF sostenibles son fondos cotizados en bolsa que replican índices compuestos por empresas seleccionadas según criterios ESG. Permiten invertir de forma diversificada en compañías responsables con el medio ambiente y la sociedad.
Estos fondos sostenibles ofrecen una alternativa de inversión más ética, flexible y con menores costes. Gracias a su diversificación, el riesgo se reduce, aunque también existen limitaciones: pueden presentar menor liquidez o rendimientos más modestos debido a la exclusión de sectores poco sostenibles.
Para invertir en ETF sostenibles es fundamental entender los criterios ESG del índice que replican y verificar si coinciden con tus objetivos y valores personales.
¿Por qué invertir en sostenibilidad?
Desde la última década, la inversión sostenible ha experimentado un fuerte crecimiento. Europa lidera este movimiento, concentrando el 85 % del capital invertido en productos responsables, según datos del informe European Sustainable Investment Funds Study del ALFI junto a Morningstar.En este artículo descubrirás qué son los ETF sostenibles, cómo identificarlos y qué factores debes tener en cuenta antes de invertir.
¿Qué son los ETF sostenibles?
Los ETF sostenibles, o Exchange Traded Funds, son una forma de inversión ética o verde. Se trata de fondos que cotizan en bolsa y que replican índices de empresas seleccionadas bajo criterios ESG.
Por norma general, estos fondos son de gestión pasiva y su cartera reproduce el comportamiento de un índice de mercado. Sin embargo, en lugar de incluir todas las compañías de un sector o región, los ETF sostenibles filtran aquellas empresas que no cumplen con los criterios ESG.
También existen ETF sostenibles de gestión activa, gestionados por analistas que buscan superar la rentabilidad del índice mediante una selección más personalizada de empresas.
Características y funcionamiento
Los ETF sostenibles se distinguen por aplicar criterios de exclusión o selección positiva a la hora de componer su cartera. Esto significa que eliminan sectores contaminantes (como petróleo, armas, tabaco o juego), o incluyen solo aquellas empresas con mejores puntuaciones ESG.
Aunque esto reduce la diversificación respecto a los ETF tradicionales, siguen ofreciendo exposición a numerosos valores, y permiten invertir desde comisiones muy bajas.
Entre las características más destacadas de los ETF de inversión sostenible encontramos las siguientes:
- Se compran y venden en bolsa como una acción.
- Son líquidos y transparentes.
- Sus comisiones son mínimas al ser, en su mayoría, fondos de gestión pasiva.
- Existen dos tipos: acumulativos con opción de reinvertir los los beneficios, y distributivos, los cuales reparten dividendos.
Para obtener resultados óptimos, se recomienda mantener la inversión entre 10 y 15 años.
Estrategias de inversión sostenibles
Los ETF sostenibles pueden seguir diferentes enfoques. Algunos de los más habituales son:
- Best-in-class: seleccionan las empresas mejor posicionadas en ESG dentro de cada sector.
- Positive Screening: priorizan empresas que han mejorado notablemente sus prácticas ESG.
- SRI (Inversión Socialmente Responsable): aplican criterios estrictos de exclusión.
- Positive Impact : buscan un impacto social o medioambiental directo.
- Sectorial: se centran en áreas como energías renovables, salud, o agua.
¿Son todos los ETF sostenibles comparables?
No. Aún existe una gran falta de estandarización en la terminología y en los métodos de evaluación. Esto dificulta comparar productos, sobre todo si están domiciliados fuera de la UE, como en EE. UU.
Además, los datos ESG se basan en cuestionarios elaborados por las propias empresas. No todos los proveedores aplican los mismos criterios, lo que puede afectar la fiabilidad de las puntuaciones.
Regulación en la Unión Europea
Desde 2019, la UE ha iniciado una serie de reformas a través del Pacto Verde Europeo, con el objetivo de estandarizar la evaluación ESG y combatir el llamado greenwashing.
La nueva taxonomía verde europea establece qué actividades económicas pueden considerarse sostenibles. Una empresa solo será clasificada como ecológica si contribuye de forma significativa a los objetivos medioambientales, como preservar la biodiversidad, evitar la contaminación o gestionar bien los recursos hídricos.
Estas normativas entrarán en vigor de forma progresiva hasta 2026, y obligarán a las empresas a revelar más información ESG de forma clara y estandarizada.
¿Cómo se comportan los ETF sostenibles?
Entre 2010 y 2019, los ETF sostenibles superaron a los tradicionales en un 9 % de media, según PwC. En los últimos años, sin embargo, su comportamiento ha sido más irregular. Tras un fuerte crecimiento en 2023, con una rentabilidad media del 12,6 % frente al 8,6 % de los fondos convencionales, según IEEFA, en 2024 la diferencia se redujo y en el primer trimestre de 2025 se ha registrado la primera retirada neta de capital en fondos verdes desde hace más de una década, de acuedo al informe de Morningstar.
Factores como la menor diversificación o el mayor peso en tecnológicas (Apple, Tesla y Microsoft suelen estar entre las principales posiciones) continúan influyendo en su rendimiento. Aun así, una buena puntuación ESG suele asociarse a una gestión corporativa más sólida y resiliente a largo plazo.
Comparando índices como el MSCI ACWI ESG Leaders y el MSCI ACWI SRI, se observa una evolución muy similar en los últimos años, aunque el segundo mantiene mayores oscilaciones debido a sus criterios de selección más estrictos.
¿Existe greenwashing en los ETF sostenibles?
No todos los productos que se presentan como sostenibles lo son realmente. El greenwashing consiste en aparentar responsabilidad ambiental sin aplicarla de forma efectiva. En ETF sostenibles, esto puede manifestarse como información confusa o poco accesible sobre inversiones en sectores contaminantes.
Algunos ejemplos negativos:
- Fondos tradicionales que cambian de nombre para parecer sostenibles.
- Fondos sin criterios de exclusión claros.
- Fondos que permiten porcentajes residuales en negocios no sostenibles (como armas o energía nuclear).
¿Qué es realmente un ETF sostenible?
Según Morningstar, la mayoría de los ETF ESG cumplen al menos parcialmente con sus compromisos. Las buenas prácticas de estos fondos sostenibles incluyen:
- Aplicación coherente de los criterios ESG.
- Uso del derecho de voto en juntas para influir en decisiones sostenibles.
- Exclusión activa de empresas contaminantes o poco éticas.
La clave está en consultar la documentación del fondo y verificar cómo se aplican los criterios.
¿Cómo invertir en ETF sostenibles desde España?
Puedes comprarlos directamente a través de cualquier broker online o banco con servicio de inversión. Muchos ofrecen también planes de inversión periódica (desde 10 € al mes), lo que facilita el ahorro a largo plazo.
¿Cómo elegir un buen ETF verde?
Antes de invertir en ETF sostenibles, es conveniente informarte y hacer una revisión exhaustiva. Puedes hacerlo a través de:
- Webs de los proveedores: ofrecen datos sobre rentabilidad, costes, composición y enfoque ESG.
- Ficha técnica o folleto: revisa qué tipo de enfoque aplica (SRI, Best-in-class, Impact, etc.).
- Índice replicado: investiga cómo selecciona las empresas (ej. MSCI ESG Leaders, S&P 500 ESG).
- Posiciones principales: consulta las 10 primeras participaciones del fondo.
Además de consultar a los proveedores de fondos y a agencias internacionales como Morningstar o Sustainalytics, en España también existen recursos útiles para analizar inversiones sostenibles:
- CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores): publica guías y criterios sobre productos financieros sostenibles en el marco del reglamento SFDR y la taxonomía europea.
- Spainsif (Foro Español de Inversión Sostenible): promueve la inversión sostenible y ofrece estudios, informes y rankings de productos ISR disponibles en el mercado español.
- Finect: una plataforma española que permite buscar y comparar fondos de inversión con filtros por rentabilidad, riesgo y sostenibilidad.
Estas fuentes permiten complementar la información técnica de los fondos con datos objetivos, estudios de mercado y análisis comparativos desde una perspectiva nacional y europea.
Dónde buscar ETF sostenibles
Existen portales especializados como justETF o TrackInsight, que permiten filtrar por criterios ESG y ofrecen comparativas de productos. También hay medios centrados exclusivamente en finanzas verdes.
Los ETF sostenibles son una opción atractiva para quienes buscan equilibrar rentabilidad y valores éticos. Sin embargo, no todos los productos que se presentan como “verdes” cumplen realmente con los estándares esperados. Por eso, es esencial informarse, comparar y leer con atención la documentación antes de tomar decisiones.
ETF sostenibles: ¿la inversión del futuro?