Mejora energética de viviendas: estrategias y beneficios fiscales

El cambio climático y la sostenibilidad son dos de los temas más discutidos a nivel global, llevando a los gobiernos y organizaciones a implementar políticas para promover la eficiencia energética en las viviendas.

Una de las propuestas establecidas por la Unión Europea es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 31% entre 2019 y 2030. Para ello, se establecen incentivos fiscales y monetarios que fomentan la práctica de medidas y soluciones sostenibles en el sector inmobiliario. El objetivo principal de estas medidas es motivar a los propietarios a realizar mejoras energéticas que cumplan con una serie de requisitos en sus hogares.

Estrategias para la mejora energética en viviendas

Rehabilitación energética integral

La rehabilitación energética de viviendas incluye una serie de modificaciones en la estructura del inmueble para mejorar su eficiencia energética. Estas mejoras pueden abarcar desde la instalación de aislamiento térmico en techos, paredes y suelos, hasta la renovación del sistema de calefacción y refrigeración para optar por soluciones más eficientes y sostenibles.

Instalación de sistemas de energía renovable

La adopción de tecnologías avanzadas como la automatización del hogar, los sistemas de gestión energética inteligente, y las soluciones de energía renovable como paneles solares y bombas de calor geotérmicas, son fundamentales para mejorar la eficiencia energética de las viviendas.

Certificación energética de viviendas

La certificación energética, como LEED o BREEAM, evalúa el consumo energético de una vivienda y la clasifica en una escala de eficiencia, lo que ayuda a identificar las mejoras necesarias y a valorizar la propiedad ante futuras negociaciones. Es más, la importancia de obtener estas certificaciones puede mejorar la competitividad de los inmuebles en el mercado actual.

Beneficios fiscales y financiamiento para inversionistas en sostenibilidad

Incentivos fiscales nacionales y locales

Se ofrecen incentivos fiscales para aquellos propietarios que decidan emprender proyectos de rehabilitación energética. Estos beneficios suelen manifestarse en deducciones en el impuesto sobre la renta o reducciones en el IVA aplicable a los materiales y servicios relacionados con las reformas. Además, en muchos municipios, se ofrecen bonificaciones en el impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO) para aquellos proyectos que incluyan mejoras en la eficiencia energética o el uso de energías renovables.

Financiamiento sostenible

Además de los beneficios fiscales, existen opciones de financiamiento diseñadas específicamente para apoyar la construcción verde y las reformas sostenibles. Estos fondos suelen ofrecer condiciones favorables, como intereses bajos y plazos de devolución extendidos, facilitando así la inversión en mejoras sostenibles. En España, por ejemplo, estos proyectos pueden beneficiarse de una amortización acelerada en el Impuesto sobre Sociedades, así como de bonificaciones en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI).

Implicaciones de la mejora energética en el valor de la propiedad

Las viviendas con mejor calificación energética suelen ser más atractivas para los compradores y arrendatarios, lo que se traduce en activos más líquidos y rentables.

Las estrategias y beneficios fiscales asociados a la mejora energética de viviendas presentan una oportunidad para contribuir a la sostenibilidad ambiental y mejorar la economía doméstica. Al aprovechar los incentivos fiscales, los propietarios pueden transformar significativamente el rendimiento energético y económico de sus viviendas.