En España el mercado inmobiliario ha demostrado ser uno de los pilares más resistentes de la economía, manteniendo un crecimiento sostenido a lo largo de los años. En 2024, a pesar de presentar un entorno económico financiero inestable y un aumento de los tipos de interés debido al impacto de políticas macroeconómicas más restrictivas, la vivienda española continúa teniendo un comportamiento resistente.
Es por esto por lo que, a medida que nos acercamos al cierre del año, queremos puntualizar que las previsiones iniciales sobre la evolución del precio de la vivienda han sido objeto de revisiones al alza, reflejando la resiliencia del sector.
Performance del precio de la vivienda
A lo largo de 2024, los precios de la vivienda en España han seguido una trayectoria creciente, con un incremento anual estimado en torno al 3%. Este crecimiento es una revisión significativa frente a las previsiones iniciales de principios de año, que anticipaban una caída del 2%. La correlación al alza se ha visto impulsada por varios factores socioeconómicos que han sostenido la demanda de vivienda, a pesar de las condiciones económicas actuales:
- Escasez de oferta: la falta de suelo urbanizable y los elevados costes de producción han restringido la capacidad de aumentar el número de viviendas disponible, manteniendo la determinación sobre los precios.
- Mercado laboral fuerte: el aumento de los salarios registrado en 2024, impulsado por revisiones de convenios colectivos que promediaron un 3%, ha mejorado la capacidad adquisitiva de las familias, mitigando el impacto de los mayores costes de financiación.
- Reducción de los tipos de interés: el BCE inició un ciclo de rebajas de tipo de interés en junio – julio. Esta situación ha aliviado la presión sobre los costes hipotecarios y se estima que, para final de 2024, el Euribor baje al 3,25%.
Factores clave para el futuro de la vivienda
Hoy en día, el mercado inmobiliario español no muestra señales de una burbuja inmobiliaria como la que estalló en 2008, coincidiendo con la crisis financiera global, lo que provocó una brusca caída en los precios de la vivienda y un colapso en la construcción. Son tres los factores que respaldan al mercado inmobiliario actual:
- Accesibilidad: la relación entre los precios de vivienda e ingresos familiares se mantiene en niveles inferiores a la media histórica, lo que sugiere que, a pesar del aumento de precios, el acceso a la vivienda sigue siendo relativamente buena.
- Tasa de esfuerzo razonables: pese al aumento de los precios y los costes de financiación, el porcentaje de ingresos familiares destinado al pago de hipotecas se mantiene en un 37,8%, cercano a la media histórica, pero significativamente por debajo de los niveles observados en la burbuja de 2007.
- Financiación prudente: más de la mitad de las hipotecas recientes se han firmado a tipo fijo, lo que reduce la exposición de los hogares a futuras subidas de tipos de interés.
Mirando hacia el futuro, las previsiones para el 2025 indican que el mercado de la vivienda en España mantiene su tendencia creciente, en torno al 2%, en relación con la inflación estimada y a la persistente escasez de oferta. Por otra parte, se espera que los tipos de interés más bajos sigan apoyando la demanda, mientras que las transacciones de vivienda se estabilizarán más o menos con 550.000 transacciones anuales.
El precio de la vivienda en España: situación actual y perspectivas futuras